Vicente ‘Huevo’ Romo, simplemente un pitcher de èliite, se trata del lanzador con la mejor efectividad en la historia de la Liga Mexicana de Beisbol y de la Liga Mexicana del Pacífico. Romo logró conseguir 364 victorias en su carrera en la LMP y LMB, curiosamente 182 en la de verano y la misma cantidad en invierno. Para la suma de otro de los varios éxitos del ‘Huevo’ Romo, se encuentra lo conseguido en 1966 cuando jugaba para los Tigres de México. Remontémonos a una noche calurosa del 9 mayo de 1966 en el estadio Tecnológico de la UDG en Guadalajara, Jalisco, donde los Charros de Jalisco enfrentarían a los Tigres Capitalinos. En dicha noche, el duelo de pitcheo sería a cargo de Vicente Romo por parte de los Tigres en contra de René Romo por los Charros. El juego comenzó con los felinos abriendo la pizarra en la sexta entrada, para que entonces el equipo jalisciense respondiera y le diera la vuelta al encuentro para la séptima, a lo que más tarde el equipo de los Tigres lo volvería a empatar y para el noveno episodio, la pizarra se mantuviera empatada a cuatro carreras. Ya en los extra innings, los Charros decidieron relevar a René Romo por el nacido en Baja California Sur, Juan Suby, y por el otro lado el ‘Huevo’ se seguía manteniendo en la lomita de los disparos. Las entradas seguían pasando, se seguían acumulando los ceros y nada para nadie, hasta que llegó el cierre de la entrada 17, en la que los Tigres tuvieron que sacar del encuentro a Romo para traer un bateador emergente, a lo que Vicente se quedó decepcionado, sabiendo que se quedó a una sola entrada de tener el récord de más entradas lanzadas en un juego, empatando así el récord de Jabao Brown impuesto en 1947 en un juego entre Alijadores de Tampico e Industriales de Monterrey. Al relevo entró Enrique Castillo, el cual tendría la labor de enfrentar a Suby, para que finalmente en la entrada 18 con un hit de Obed Plasencia los Tigres se pusieran al frente. Castillo cerró el encuentro enfrentado a tres hombres, lo que lo hacía el ganador del juego, siendo Suby el que se llevaría la derrota tras 11 innings lanzados. Ese 9 de mayo de 1966, los Tigres vencieron a los Charros 5-4, además de que se presenció 16 entradas por parte de Vicente ‘Huevo’ Romo, algo que muy probablemente no se vuelva a ver en la historia del beisbol.